En el diseño de una oficina entran en escena una serie de elementos, que además de trabajar en la estética, también deben estar orientados al adecuado aprovechamiento del espacio. En este sentido, cobran mucho sentido los distintos tipos de mamparas para oficinas. Permiten crear divisiones en espacios abiertos o diáfanos sin que sea preciso el levantamiento de muros.
Lo que se pretende con estas mamparas divisorias es la obtención de unas condiciones de privacidad. Como las necesidades son variables, que van desde la separación de una parte de la oficina para llevar a cabo reuniones hasta la utilización de biombos para evitar distracciones, las empresas deben decantarse por la propuesta que más necesiten. Hay una amplia variedad de tipos de mamparas para oficinas.
El uso de estos elementos no está limitado a las oficinas, ya que también pueden encontrarse en ferias, hoteles, centros de salud o hasta en casas para conseguir distintos tipos de ambientes.
Clases de mamparas para oficinas
A continuación desgranamos las mejores mamparas para que te hagas una idea de cuál puede ser la propuesta más conveniente.
- Mamparas de cristal: son las aconsejables cuando se busca conseguir una mayor sensación de amplitud en un espacio cerrado. Principalmente, se utilizan para sacarle un mayor rendimiento a la entrada de luz natural, además de para perimetrar salas de reuniones y despachos de manera sencilla. Por lo general, estos tabiques de cristal se sustentan sobre cantos de aluminio o lacados que proporcionan un acabado muy profesional.
- Mamparas de metacrilato: este material plástico resulta más ligero y resistente que el cristal. Es una opción muy interesante al considerarse un perfecto aislante térmico y acústico, además de ser prácticamente irrompible. Cuentan con un 93% de trasparencia y contribuyen a mejorar la eficiencia de cualquier estancia dentro de una oficina.
- Mamparas ciegas: uno de los tipos de mamparas para oficinas que tienen bastante éxito con las ciegas, que ocultan por completo la vista de la estancia. Se emplean, sobre todo, para conseguir una privacidad y aislar un espacio. Lo habitual es que se fabriquen con tableros de melamina, aunque pueden hallarse de otros materiales.
- Mamparas mixtas: estos elementos de separación tienen la capacidad de combinar elementos transparentes, como puede ser el cristal, con otros que no lo son. Es habitual que a partir de media altura se introduzca la cristalera.
- Biombos de oficina: se utilizan en lugares de trabajo que se quieren conservar totalmente abiertos. Nos encontramos con una estructura flexible y ligera que le proporciona al trabajador una cierta privacidad. Según el material utilizado, puede obtenerse una serie de prestaciones como la absorción de sonido.
- Tabiques móviles mixtos: los paneles o biombos mixtos pueden fabricarse en combinación con una gran variedad de materiales, como pueden ser la melanina o la madera. Tienen la particularidad de que pueden trasladarse de un sitio a otro de la oficina para conseguir el aislamiento y privacidad requeridos.
Ventajas de instalar una mampara en la oficina
De entre todos los tipos de mamparas para oficinas que encontrarás en el mercado, cualquier opción puede satisfacer la necesidad del cliente. Se trata de una solución muy interesante por la rapidez de instalación y porque no requerirá del levantamiento de tabiques. Por lo tanto, resultará mucho más económico la inversión para reformar la oficina.
- Distribución y aprovechamiento del espacio interior. Además de una mayor eficiencia acústica, térmica y lumínica.
- Instalación y mantenimiento sencilla y económica. En comparación con soluciones más costosas y que requieren más tiempo como los tabiques. Además, la limpieza y desmontaje es mucho más sencillo.
- Las mamparas divisorias de oficina ofrecen una luminosidad máxima. Gracias a estos separadores de espacio, permite la entrada de luz natural en espacios diáfanos, aportando la privacidad necesaria en estas zonas.
- Diseño Estético de Vanguardia. Aporta modernidad a la oficina ofreciendo grandes cambios sin costes excesivos ni obras.
- Flexibilidad de espacio. Las mamparas permiten aislar espacios sin tener que hacerlo con la totalidad o aislar parcialmente alguno de los puestos que por volumen de ruido o necesidad de privacidad así lo necesitan.
Las mamparas se utilizan en construcciones modulares que se desmontan con facilidad y se llevan a otros lugares con bastante facilidad. Además, ayudan a aprovechar mucho más la luz natural cuando se tratan de separadores transparentes. Los trabajadores de la oficina tendrán la sensación de que se encuentran en una estancia abierta y no habrá la percepción de que se pierde espacio.
